¿Personas ilegales?... Mito o realidad
21 de noviembre
Charla-coloquio con tres grandes testimonios acerca de la situación que muchas personas se ven obligadas a sufrir cuando quieren huir de sus países para salvar la vida.
El 21 de noviembre, nuestra Comisión de Conferencias organizó una charla-coloquio acerca de un tema que tanto nos preocupa actualmente y está tan a la orden del día: la inmigración y la acogida de dichas personas que cruzan las fronteras sin seguir los sistemas convencionales huyendo de situaciones desesperadas.
Bajo el título "Personas ilegales, ¿mito o realidad?" tuvimos un debate muy interesante acerca del término ilegal y su repercusión en nuestra sociedad. Para ello tuvimos a tres ponentes diferentes que nos pudieron contar su punto de vista y nutrir el diálogo con datos y experiencias.
Inició hablando la abogada Dana García de la Asociación SOS RACISMO quien nos presentó el panorama legal español en el que se enmarcan los conceptos de la ilegalidad y la inmigración. Comentó, en rasgos muy generales, cuál es el proceso que debe pasar una persona que entra en el país por vías ilegales, las problemáticas que presentan los vuelos de deportación donde se devuelve a estas personas a sus países de origen y la situación de los Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE).
También pudimos escuchar el gran testimonio de Juan Pablo Díaz, quien apenas lleva residiendo en España unas tres semanas. Venezolano de nacimiento, tuvo que huir de su propio país ante la gran represión que está sufriendo el pueblo venezolano bajo el mandato dictatorial del presidente Nicolás Maduro. Juan Pablo tuvo que abandonar a sus seres más queridos, su trabajo como profesor, amistades, costumbres... es decir toda una vida para alejarse de su amada Venezuela. Sin lugar a dudas, fue un testimonio desgarrador, ya que Juan Pablo todavía está sufriendo las consecuencias de este cambio. Y es muy triste escuchar como nos contaba los insultos y amenzas que sufrió en el metro la semana pasada por dos desconocidos ignorantes por el siemple hecho de ser de otro país.
Por último, Simakha nos relató cómo llegó a España y las situaciones que tuvo que vivir. Simakha es de Mali (África), un país que sufrió una gran guerra en 2012. Ante esta situación donde los ejércitos obligaban a la población más joven a coger un arma y luchar, Simakha decide huir para poder salvar la vida, tener un futuro y no morir por una causa que no le representa. En ese momento es cuando se le presenta la oportunidad de ir a España. Así es como Simakha llega a España: bajo unas condiciones inhumanas, estafado por las mafias que controlan el traslado de las personas que quieren cruzar la frontera y recibido en España pasando 72 horas en un calabozo hasta que es trasladado al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) donde permanece un año entero. Actualmente, Simakha trabaja en la Comisión Española de ayuda a los Indocumentados para poder solventar las lagunas, problemas y errores que ocurren diariamente en el proceso de acogida a los inmigrantes. Además colabora con el PROYECTO BALIMAYÁ quienes tienen un piso de acogida en Madrid para jóvenes migrantes.
Después de escuchar estos tres grandes testimonios, se generó un debate muy interesante con las colegialas. No podemos dar la espalda a esta situación ya que, es de plena actualidad y está ocurriendo en toda Europa; si callamos ante las injusticias nos convertimos en cómplices. Debemos ser parte del cambio que queremos ver, por eso se debe ir cambiando el discurso que se tiene frente al inmigrante, y con ello cambiará la cultura. El inmigrante no viene a España por gusto y de vacaciones, viene por necesidad y debemos reconocer sus derechos y la persona humana que hay detrás de cada cifra.
Aunque creamos que no seamos capaces de abarcar todo el problema, debemos recordar una gran frase de Eduardo Galeano: gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, puede cambiar el mundo.